Aries, vienes de un eclipse lunar en Piscis que aún resuena con fuerza en tu inconsciente. Esta semana se siente como un eco de lo revelado: sueños intensos, intuiciones claras y quizás la sensación de que algo dentro de ti necesita cerrar un ciclo.
Saturno retrogradando en Piscis refuerza esta dinámica, llevándote a examinar viejas responsabilidades que cargas en silencio. Es un tiempo de introspección profunda, pero no de parálisis: el universo quiere que sueltes lo que drena tu energía.
El Sol y Mercurio en Virgo ponen el foco en tu día a día: trabajo, rutinas y salud. Estás en un momento ideal para organizar tus proyectos, dar estructura a tus horarios y comprometerte con nuevos hábitos. Tu naturaleza impulsiva puede resistirse, pero este tránsito te recuerda que la disciplina no limita tu fuego, sino que lo sostiene. Una alimentación equilibrada, descanso y actividad física consciente serán claves para tu rendimiento.
En el terreno emocional, las relaciones también pasan por revisión. Urano retrogradando en Géminis activa tu zona de comunicación: viejas conversaciones o malentendidos regresan, pero esta vez con una oportunidad de aclararlos desde otro ángulo. Tu manera de expresarte puede estar cambiando: menos prisa, más conciencia.
En lo laboral, esta semana puede sentirse como un punto de reorganización. Es posible que surjan ajustes inesperados en tu entorno, pero tu creatividad está lista para aportar soluciones. Lo que hagas ahora, aunque parezca pequeño, será la base para logros más grandes en octubre.
? Consejo de la semana
No intentes avanzar sin antes soltar cargas invisibles. Tu energía necesita depuración: confía en tu intuición y organiza tu fuego con disciplina.